Mi reflexión de hoy, 27 de diciembre de 2013

Reflexión de hoy, 27 de diciembre de 2013

Estoy acabando de trabajar, pero antes de apagar el ordenador para irme a comer, me gustaría hacer una pequeña reflexión.

dandOs voy a contar superficialmente la historia de Oscar; cuando vino por primera vez a verme y me dijo que su problema era, que no se quería, que su autoestima estaba por los suelos;  cuanto menos, me sorprendió.

Oscar tiene 20 años, es una persona muy educada con un expediente académico brillante, con un buen físico y, además, es atleta profesional. La verdad es que puede costar entender como se puede infravalorar tanto.

Su problema es que se autoexije muchísimo y no tolera sus “fracasos”, busca la perfección en todo lo que hace y no se permite alcanzar unos niveles medios. Teme constantemente defraudar a los demás, por eso se esfuerza muchísimo en todo lo que lleva a cabo, pero nunca se siente bien consigo mismo. ¿a que pensáis que se debe?

Cuantas veces los papas, sin darnos cuenta, volcamos nuestras frustraciones o sueños no alcanzados en nuestros hijos, y tratamos que logren aquello que nosotros no alcanzamos en su momento o no nos dieron la posibilidad de intentarlo. Hay que tener mucho cuidado y saber hasta donde debemos llegar con las exigencias que les planteamos a nuestros hijos; el marcador de exigencia será la suma de su personalidad, sus aptitudes y su actitud.

Como padres, debemos tener presentes algunos obstáculos que limitarán la autoestima de nuestros hijos:

  • Tener de ellos expectativas muy altas o muy bajas
  •  Gritarles, criticarles, humillarles y/o ridiculizarles, sobre todo frente a los demás.
  • Utilizar adjetivos despectivos como: flojo, tonto, estúpido
  • Transmitirle de diversas formas que no es suficientemente capaz: compararlo,..
  • Decirle que ha fracasado cuando se equivoca. “Fracaso” debería ser palabra tabú.
  • Sobreprotegerlo.
  • Castigarlo por expresar sentimientos “inaceptables”: debilidad, llanto, frustración.
  • Hacerle sentir que sus pensamientos y sentimientos no valen ni importan.
  • Educarlo sin reglas.
  • Alterar la propia realidad del niño.

Mi reflexión de hoy va dirigida a los papás; debéis mirar al  niñ@ real que es vuestr@ hij@; conocer,  asumir y aceptar sus dificultades, sus particularidades, sus virtudes y sus preferencias; entender el comportamiento del niñ@ en su contexto.

 

No Comments

Post A Comment