Uno de mis objetivos fundamentales como psicóloga y life coach es que la persona a la que entreno y trato de ayudar para que logre ser más feliz en su vida, tanto profesional como personal, se sienta cómoda en los ratos que compartimos en cada sesión presencial.

A pesar de ello, aún son muchas las personas que se incomodan cuando tienen que hablar “cara a cara”, con un profesional, de ciertos temas importantes para ellas, generándoles malestar, vergüenza y otras emociones negativas. Incluso, en muchas ocasiones, por no afrontar esta situación, prefieren no solicitar ayuda.

• Accesibilidad desde cualquier lugar. Se evitan los desplazamientos, permite la posibilidad de que el paciente o coachee sea quien escoja aquel lugar donde se sienta cómodo y tranquilo para realizar la sesión.
• Ahorro del tiempo. Para personas ocupadas, que disponen de poco tiempo en su agenda; de este modo, no se utiliza más tiempo que el necesario para la sesión.
• Anonimato. En la terapia que lo permita, el anonimato es una opción. La sensación de anonimato ayuda a que algunas personas se sientan mas relajadas en su intimidad y aumente la sensación de comodidad.

Las consultas psicologicas y de coach online se pueden realizar por teléfono, WhatsApp, Skype o cualquier herramienta similar.